Fin del Taller de Corporalidad, que durante nueve sesiones a lo largo de los meses y guiado por Cesar M., ha tenido lugar en BerriOna.
“Pretendía –en palabras de Cesar- abrir una puerta, ofrecer un camino”.
Y es que el Taller quería llevarnos un poco más allá y descubrir por medio de unos ejercicios corporales sencillos y un momento de meditación y de reflexión compartida… a ser conscientes de nuestro propio cuerpo.
Al viernes pasado (14 junio) algunas/os de los participantes se reunieron a evaluar y valorar esta actividad. A pesar de las pocas sesiones y las dificultades, a veces para asistir alguno de los sábados, su valoración fue positiva (aun habiendo cosas para mejorar); se sugirieron propuestas para el año próximo y se agradeció la propuesta hecha por BerriOna dentro de su programa anual.
Dice Enma Martinez Ocaña en su libro “Cuando la Palabra se hace cuerpo…”
“El cuerpo se convierte en el lugar de la manifestación de nuestra persona, de nuestros valores, de nuestra fe. En este sentido puede mostrase como revelación no solo de nuestra personas sino de Dios; se hace lugar para la presencia Invisible, se hace espiritual. Porque nuestro valores, deseos, proyectos llegan a ser verdad cuando pasan por el cuerpo, cuando se hacen cuerpo y se verifican”
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Foto: Algunos de los participantes al final de la reunión de evaluación