Diálogos. Desde evang 27 nov22
- 27 de Noviembre de 2022
"Os anuncio que comienza el Adviento.
Alzad la vista, restregaos los ojos,
Otead el horizonte,
Daos cuenta del momento.
Agudizad el oído.
Captad los gritos y susurros,
El viento,
La vida...
Alegraos, saltad de júbilo.
¡Que se note!
Viene Dios.
Avivad la alegría, la paz, la esperanza.
Preparad el camino.
Ya llega nuestro Salvador. Viene Dios...
Y está a la puerta.
¡Despertad a la vida!"
Es un tiempo nuevo. Es el tiempo del despertar. De estar preparados, atentas, al tanto
Es el tiempo de la esperanza, no de esperas rutinarias.
Aquello que dice el evangelio de hoy que ocurrió en tiempos de Noé… como que nos pilla muy lejos, pero… sin embargo guarda una enseñanza muy valiosa para nosotros hoy y aquí.
Y es esta: que debemos estar y ser conscientes. Mirando a nuestro alrededor.
--Para no dejarnos abrir más boquetes en nuestra casa (que es imagen de nuestra vida, de nuestra existencia). Agujeros de miedos, de insolidaridad, de amor no verdadero, de no asumir el perdón, de no compasión ante las situaciones sangrantes de tantas personas y situaciones….
--Para descubrir la presencia de Dios en la vida, en mi vida, en este tiempo. El Dios-con-nosotros. El que viene, el que habita y nos habita. El Dios de la Navidad
--Para generar esperanzas, anhelos en un mundo donde se vaya haciendo (y vayamos haciendo) realidad los valores del Reino. (Donde como decía el profeta Isaías, de las espadas se forjen arados y de las lanzas podaderas)
Adviento no es solo un tiempo. Es una actitud.
“Estad en vela” “Estad preparados” –nos dice Jesús.
“Daos cuenta del momento en que vivís. Es tiempo de despertar” –dice el apóstol Pablo cuando escribe a la comunidad de Roma.
Yo siempre me he preguntado ¿Qué sería de la vida normal, la de cada día, sin estas llamadas, sin estos toques de atención que nos hacen espabilar?
Estos, estos tiempos nuevos, nos sacan del fatalismo y de la resignación y nos ponen –como creyentes—en esa disposición nueva para dejarnos encontrar por Dios.
Este tiempo de espera, de preparación a la Navidad, es sobre todo un tiempo de esperanza.
Así pues, vivamos con esperanza. Porque todo encuentro pide un Re-encuentro y porque no todo está bien.
La esperanza es esperar a pesar de todo.
Una esperanza que no es un mero optimismo sino una actitud de soporte ante la adversidad.
Yo me atengo a lo dicho:
la justicia,
a pesar de la ley y la costumbre,
a pesar del dinero y la limosna.
La humildad,
para ser yo, verdadero.
La libertad,
para ser hombre.
Y la pobreza,
para ser libre.
La fe, cristiana,
para andar de noche,
y, sobre todo, para andar de día.
Y, en todo caso, hermanos,
Yo me atengo a lo dicho:
¡la esperanza!
“Atrévete” dice el lema. “Atrévete a buscar, a encontrar, a vivir”
Dios nos viene.
Está.
Es Adviento.
Preparemos la Navidad.