Diálogos. Desde evang 6 febr22
- 06 de Febrero de 2022
1.- Una palabra diferente.
Al llegar al lago de Genesaret, Jesús vive una experiencia muy diferente a la que había vivido en su pueblo. La gente no lo rechaza sino que se “agolpa a su alrededor”.
No buscan milagros. Quieren oír La Palabra. Vienen donde Jesús para oír una palabra diferente. “La Palabra de Dios”. La gente no quiere una palabra cualquiera. Busca una palabra más auténtica.
2.- Y Pedro, después la redada de peces que habían pescado por hacer caso a la palabra de Jesús, se arrojó a los pies de Jesús y dijo: “Aléjate de mí, Señor, que soy un hombre pecador”
Y aquella actitud de saber lo que uno es y lo que uno hace, reconociendo que muchas veces no estamos a la altura….
Le llevaron a Jesús a valorar más a aquel hombre.
Por eso, como dándole una palmada en el hombro, le dijo “No temas, no tengas miedo” Yo confío en ti. A partir de ahora tendrás una misión más importante.
3.- “Rema mar adentro y echad las redes…”
Y al atreverse, confiando y fiándose de su palabra, lo hicieron.
Y consiguieron una pesca (unos resultados) muy grande. (“gran cantidad de peces”, “dos barcas”, “una red que casi se rompe por la cantidad”..). Fiarse de Jesús da un resultado inmenso, quiere contarnos el evangelista Lucas.
Y nosotros/as, los cristianos, las comunidades cristianas deberíamos tener en cuenta estos tres “detalles”.
1.- También la gente, los demás, esperan de mí y de ti, de nosotros: Una palabra humilde, realista, atenta. Una palabra que calla para escuchar al otro. Unas palabras que hacen lo que dicen. Una palabra de fe. Extraída del evangelio y meditada en el corazón.
Un mensaje donde se pueda ver sin mucha dificultad la verdad de Dios y donde se puede escuchar su compasión y su amor.
2.- En segundo lugar los cristianos debemos vivir esa actitud del arrepentimiento y del perdón.
Hoy casi nadie queremos oír hablar de nuestra propia culpa o pecado.
Siempre la culpa la tienen otros y nadie nos hacemos responsables del egoísmo, la mentira, la injusticia o la violencia que rodea nuestro vivir diario y nuestras relaciones sociales.
La culpa de la pobreza, del cambio climático, de la injusticas a la luz del día…siempre parece que está en los demás.
Saber ponernos con nuestras limitaciones y errores delante de Dios y de los demás y decir. Perdóname, nos ayuda a levantarnos, a cambiar y a vivir más libres.
“No tengas miedo”
3.- Y por último, “Rema mar adentro”
Es una invitación a salir más allá de nuestras seguridades, de lo de siempre. Y adentrarnos más allá.
Al mar adentro solo se va desde una actitud confiada y libre.
Donde muchos de nuestro sueños, están esperando a realizarse.
A donde la vocación nos lleva.
Donde también, y en expresión del Papa Francisco, es las periferias existenciales donde tantas personas demandan escucha, acogida, comprensión y justicia.
Y donde, si nos fiamos, como los discípulos, se nos darán resultados sorprendentes.
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Y entonces sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo siguieron." (de Lc. 5)
Con la premura de lo determinante
y las ganas deseosas
de Buenas Nuevas;
no se lo pensaron mucho,
saltaron gozosos
a pesar de sofocantes incertidumbres.
Salieron en pos de Él
no de una ideología
o lo que diga la gente.
Pescadores de ilusiones posibles
y utopía evangélica realizable.
Buscadores de hombres y mujeres libres.
No se trata de convencer
como quien vende cosas,
ni agasajar para lograr
adeptos para no sé qué.
Hacia Ti
atraídos por tu bondad entrañable
y el amor a Dios
como entrega inaplazable.
(Toño Martínez)