Desde Evang domingo 22 Nov20

  • 22 de Noviembre de 2020
imagen Desde  Evang  domingo 22 Nov20

1.-¿No os pasa también a vosotros (al menos a mí sí, muchas veces) que leemos un pasaje del Evangelio y …lo vemos desde fuera?
Como si no fuera conmigo ni con mi vida.
Como si yo fuera un espectador pasivo de una escena que otros representan.

Y cuando nos pasa eso. Pues, a continuación nos levantamos y decimos: “¡ha estado bien este pasaje!” o… “esta vez ¡no me ha dicho nada!”
Y salimos y seguimos igual. Con nuestras tareas, rutinas y … vida.

2.- Pero este Evangelio de hoy no nos deja ser solo espectadores.
Porque es como una obra de teatro (un teatro de la vida), donde tú y yo y todos somos los actores.
Todos estamos en el escenario.
Todos tomamos (tenemos que tomar) partido.
Unos aquí y otros ahí.
Y…no sabemos dónde ponernos. “A ver dónde van los demás”
Pero no te puedes quedar en medio. Hay que optar por un lado u otro.

Oración:
“A Ti, Señor levanto mis ojos
a Ti que habitas en el cielo
y entre la historia y las personas de todos los tiempos.
Levanto mis ojos
de donde viene mi esperanza.
La esperanza que llega a borbotones
de tu inmenso amor
de que no te olvidas nunca de mí”


3.- Y (en el escenario) hay dos frases que se repiten. Dos verbos que suenan una y otra vez:
* “Señor ¿Cuándo te vimos….? VER.
Nuestras vidas están tan centradas, a veces, en nosotros mismos que no vemos, no percibimos lo que ocurre a nuestro alrededor.
Y dejándonos llevar de nuestra ceguera o nuestra comodidad o nuestros miedos…hacemos como el avestruz (que esconde la cabeza)

Por eso muchas veces , no vemos el dolor, el sufrimiento de los demás.
Y los hambrientos, los pobres, los encarcelados, los forasteros, los... se nos hacen invisibles.
“Pero ¿Cuándo te vimos….?

Ver es una llamada personal, pero también comunitaria y política y social.
Que tiene que ver con las actitudes personales pero también con las estructuras. Tiene que ver con el amor y la caridad compasiva y también con la justicia social y la dignidad de todo ser humano.


• Y el otro verbo que suena en el escenario de hoy, una y otra vez es HACER.
“Cada vez que lo hicisteis” “ “Cada vez que lo hicisteis con uno de estos mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis”

No solo buenas intenciones, buenas palabras sino gestos y actitudes y acciones concretas.
Donde se pone en juego mi tiempo, o mi tranquilidad, o mi dinero. Donde se pone en juego mi vida.

Acciones de vida que son las que van dando un tinte nuevo a todo mi ser.

Ya había dicho Jesús. Porque “No todo el que diga Señor, Señor entrará en el Reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo”

Si muchas veces son pequeñas cosas
Que no sacan de la pobreza
que no pueden con las situaciones de injusticias
que parecen pequeños gestos

Pero que tienen un valor inmenso
Porque nos cambia a nosotros mismos
y, además, son ejemplo para los demás.


4.- Si intentamos VER y HACER de manera positiva, abierta, acogedora…. al final escucharemos estas palabras:
“Venid, benditos de mi Padre, heredad el Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo….”


  • Diálogos / Elkarrizketak
  •