Desde Evang domingo 17 Febr
- 17 de Febrero de 2019
¿No os pasa que al terminar de releer el texto del evangelio de hoy miramos para un lado y para otro como buscando dónde colocarlo y diciendo: que no me mire a mí mucho?
Nos incomoda. Y nos surgen tres tentaciones.
La primera, llevarlo hacia atrás. Pasar la página. Decir que esto tendrá muchas interpretaciones.
La segunda, alejarlo al futuro. Como que Dios ya arreglará las cosas. Además siempre ha sido así y siempre será.
Y la tercera, no mirarme a mí mismo. Y no llegar a creerme que yo soy también parte del problema y de la solución.
Y es que me fijaba en como Jesús se para “en un llano”, a pie de calle y dice una y otra vez: “Ahora”, “los que ahora….”
¿Cómo permanecer en silencio mientras se quiebra la vida de tantas personas, hermanas y hermanos nuestros?
Y no estamos hablando de ayer ni de mañana. Sino del hoy, ahora y aquí.
Son mis actitudes y mis actuaciones las que también hacen que la Justicia, la Igualdad, la Fraternidad (con mayúsculas) se diluyan y se difuminen hasta justificar situaciones del desequilibrio injusto que hay entre personas, colectivos y pueblo.
“¡Ay de vosotros, los que ahora….!"
Y Dios -dice Jesús- se pone de parte y al lado del pobre, del que llora, del que tiene hambre. ¡Dichosos vosotros!
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Hoja de “La Palabra”. En Ver Adjuntos
Cada semana (sábado a las 19,00h.) encuentro para leer, compartir… el Evangelio del domingo.